La Policía Nacional de Madrid detuvo a diez jóvenes, ocho de ellos menores de edad, por robar 24 teléfonos móviles de alta gama con un valor que supera los 23 mil euros.
Los ladrones tienen nacionalidad rumana y fueron detenidos mordiendo los cables que ataban los celulares a los mostradores.
El asalto ocurrió en un comercio de Apple situada en la Puerta del Sol en Madrid. La investigación se había iniciado a finales del año pasado como consecuencia del aumento de robos de iPhones.
Este grupo actuaba distribuyéndose de manera conjunta, planificada y con reparto de funciones por todo el establecimiento, pero en un momento llamaron la atención de los empleados y personal de seguridad y justo cuando estaban cortando los cables con los dietes fueron detenidos.
Por lo general, uno mordía el cable y cuando estaba lo suficientemente débil, lo arrancaba y se lo pasaba al que estaba más cerca de la puerta para que saliera rápido.