El tema da para la risa, pero para ella, es muy serio. Sami Walton, una joven británica de 29 años, de Bershire, se confesó adicta al sexo, y reveló que esta adicción le provocó serios dramas. Para tranquilizarse, necesita tener sexo al menos 10 veces al día.
¿Cómo le sucedió?
Sami dijo que la enfermedad se le despertó cuando tenía 20 años, a raíz del trauma que le provocó la ruptura con una pareja con la que pasó mucho años. A partir de allí, su vida entró en un descontrol en el que tenía sexo y relaciones casuales con quien se le cruzara por su camino. No discriminó entre hombres y mujeres, ni horario, ni lugar. Como consecuencia de estos desórdenes, fue perdiendo amigos y hasta su trabajo.
Hace poco más de seis años, se dio cuenta de lo que le pasaba no era normal. Decidió ir a un psicólogo que le explicó que sufría de una enorme ansiedad y terminó medicada. Aunque para muchos puede resultar gracioso, ella comenzó a vivir un verdadero calvario.
Afortunadamente encontró a James, un hombre de 38 años con quien está en pareja. "Al principio creía que me había sacado la lotería. Pero ahora veo que es sumamente agotador. Con todo, intento ser comprensivo", declaró James, además de confesar que ha tenido que mantener relaciones sexuales con Sami hasta 40 veces en un solo fin de semana, algo que apenas pudo soportar.
Ella por su parte, no ahorra elogios para su actual pareja: “La mayoría de los hombres piensan que van a tener una pareja que necesite mucho sexo, pero ninguno de mis anteriores novios pudo manejar mi situación. Soy muy afortunada en tener a James. Él no sólo tiene la resistencia para seguirme el ritmo, es un gran apoyo para mí y nunca me juzga cuando tengo un mal día”.