Todd Orr sobrevivió a un inusual ataque, ya que perdió mucha sangre pero logró llegar al hospital.
El hombre suele realizar este tipo de excursiones, a veces para cazar renos, y otras solo para escalar montañas, como sucedió esta vez cuando se encontraba en el Beaverhead-Deer Lodge National Forest.
Todd fue atacado por una gran osa que estaba con sus crías y contó en su cuenta de Facebook que el animal se lanzó sobre él y comenzó a atacarlo sin piedad. Lo único que pudo hacer fue protegerse con sus brazos, cubriéndose lo máximo posible su rostro y cabeza.
"Estaba encima mío mordiendo mis brazos, mis hombros y mi mochila. La fuerza con que lo hacía parecía un martillazo de dientes. Dejaba de morder por unos segundos y volvía a hacerlo. Una y otra vez. Después de unos minutos que parecieron una eternidad, desapareció", contó el hombre en su perfil.
Orr continuó su dramático relato: "Aturdido me levanté con cuidado. Estaba vivo y era capaz de caminar así que me dirigí camino abajo unos tres kilómetros donde estaba mi furgoneta. A mitad de camino por el sendero, miré mis heridas. Esperaba que el sangrado no fuera significativo. Pero a los diez minutos, escuché un sonido y volví a encontrar a la osa gris".
La sangrienta y dramática escena se repitió. "La sangre chorreaba por mi cara", recordó Orr. "El dolor me hizo flaquear. No me moví. Pensé que esto sería el fin". Pero al parecer, sin saber muy bien el motivo, la osa se detuvo nuevamente.