Una familia dominicana sufre un drama impensado. Gritos y llantos desesperados se escucha en el video cuando los padres se niegan a enterrar a su hija. Escenas de caos se observan junto al cuerpo inerte en el cajón, mientras piden no enterrarla.
Priscila Toribio, de 15 años, fue declarada muerta por los médicos tras sufrir fuertes dolores de cabeza. “Ahora yo estoy confundida y nadie me dice si mi hija está viva o muerta”, declaró la madre de la adolescente.
Sus seres queridos insisten en que puede estar viva y que no tiene las características comunes de un cadáver porque no tiene el rigor de mortis habitual ni desprende olores típicos.
Ahora las autoridades y funcionarios de Salud Pública prometieron comenzar una investigación para esclarecer el caso.
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