La semana pasada se desarrolló una sorpresiva reunión entre Mauricio Macri y Martín Llaryora. El intendente de la ciudad de Córdoba viajó hasta Buenos Aires y se juntó en las oficinas del expresidente.
El encuentro fue el jueves 17 de noviembre y duró una hora y media, según dio a conocer La Nación. La reunión entre Macri y Llaryora no cayó para nada bien dentro de Juntos por el Cambio Córdoba y agitó aún más interna de cara a las elecciones del año que viene.
Hasta este momento, los principales dirigentes de la oposición nacional habían manifestado la necesidad de un fin de ciclo de Hacemos por Córdoba en la gobernación. Lo hizo el propio Macri, al igual que Rodríguez Larreta, Patricia Bullrich y María Eugenia Vidal, entre los más destacados.
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Esta reunión entre el intendente de Córdoba y el exmandatario se da en medio la tensión ya instalada entre Rodrigo de Loredo y Luis Juez, quienes seguramente pelearán por la postulación a gobernador de la provincia.
También cabe señalar que los precandidatos a presidente de Juntos por el Cambio, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bullrich, le habían solicitado a Macri que se mantuviera al margen de lo que sucede en Córdoba a pocos meses de las elecciones.
“Ni Macri ni Martín tomaron ninguna decisión ni hablaron de ningún dirigente; solo fue un café con una conversación sobre temas de actualidad internacional y nacional. Mantiene la idea de Schiaretti de construir una coalición cada vez más amplia, como dijo en su lanzamiento”, dijo al medio antes citado una fuente cercana a Llaryora.