Un hombre de 57 años murió en el hospital Carrillo, en el partido bonaerense de Tres de Febrero, luego de recibir un balazo en medio de un robo y no poder transfundirse. Por su delicado estado, los médicos ordenaron una cirugía de urgencia pero Margarita, la mujer de la víctima firmó un documento para no permitir que le realizaran transfusiones de sangre. Ella es testigo de Jehová. Los médicos explicaron que sin transfusión no se podía operar y que su estado empeoraría. Sin la autorización, a las pocas horas José Alberto López murió.
Conmocionado por la noticia, Víctor, hermano de José Alberto López aseguró que la decisión que tomó su cuñada es injusta porque la víctima no era religiosa y que, en todo caso era católico pero no testigo de Jehová. En diálogo con el canal de noticias TN, contó que le pidió por favor que reviera su actitud y autorizara la transfusión pero no pudo convencerla y José Alberto murió.
El hecho. José Alberto López fue atacado por cuatro delincuentes que quisieron robarle la camioneta a la salida de su casa en el barrio porteño de Caseros. La víctima trabajaba como asesor de un contador público en el centro de Capital Federal. Según testigos, López no se resistió y entregó su Ford EcoSport pero uno de los delincuentes le disparó igual. La bala le perforó los pulmones.