Hugo Chávez se acercó a Irán desde que llegó a la presidencia, pero al vínculo lo construyó con el fanático Mahmud Ahmadinejad, incluyendo la financiación de las acciones de Hezbolá en Latinoamérica.
Esta vez, las víctimas fueron niños. Que el flagelo recurrente de las masacres haya costado la vida de diecinueve niños, a las que se suman las de dos maestras, marca una diferencia. El espanto, la indignación y el dolor son mayores. Falta ver si la diferencia se ve también en el resultado del debate.
En todos los rincones del planeta el centro está jaqueado por izquierdas y derechas que quieren construir regímenes “mayoritaristas”, en los que el líder esté por encima de la institucionalidad.
Después del protagonismo de la ultraderecha y el centro en las elecciones presidenciales de abril, se espera otro posible fenómeno político para las parlamentarias de junio. El rol desafiante que asume la izquierda.
El centro volvió a conjurar la llegada de la ultraderecha al poder en Francia. Pero ese movimiento que se originó reivindicando al régimen de Vichy que encabezó el mariscal Petain y respondía a las órdenes de Hitler, volvió a crecer en las urnas.
Según Rusia, ya comenzó el conflicto del que se habla desde mediados del siglo 20. Pero eso aún no ocurrió. ¿Cuál sería la señal de esa tan temida conflagración global?