Investigadores viajaron a Mendoza y lograron testimonios de sus anteriores docentes y del abuelo de la nena de 12 años que fue violada y asesinada por su padrastro.
La jueza entiende que la mujer omitió los abusos previos del padrastro y por eso fue partícipe necesaria del terrible crimen. También ordenó un estudio clave para el hermano de nueve años.