Las hermanas de 12 y 13 años de edad le confesaron a su madre los tormentos a las que eran sometidas por sus hermanos de sangre. Se aprovecharon durante años, cuando los padres se iban a trabajar a los aserradores del Chaco. "Nos pegan y llevan al monte para violarnos", le contaron.
Tratadas como esclavas sexuales, las niñas relataron el horror vivido a pesar de las amenazas. Las manoseaban desde los seis o siete años y con el paso del tiempo comenzaron las violaciones. En los largos periodos en que los padres no estaban en la casa, pasaban hambre y las trataban peor que a los animales.
+ MIRÁ MÁS: Echaron al secretario de Seguridad de La Rioja
El caso tiene conmocionada al pequeño poblado del departamento Copo, que se encuentra sobre la ruta provincial Nº 2, en la margen izquierda del río Salado, 90 kilómetros al sudoeste de Monte Quemado.
La investigación está cargo de los fiscales Santiago Bridoux y Gabriel Gómez. Se ordenaron distintas pericias, exámenes médicos y la Cámara Gesell, informó El Liberal.