La Justicia de Córdoba declaró que una mujer fue víctima de violencia de género psicológica y sexual durante un examen ginecológico en un centro de salud privado de la ciudad de Córdoba. El Juzgado de Niñez, Adolescencia, Violencia Familiar y de Género de 4° Nominación descubrió que el profesional no estaba especializado en tocoginecología.
Todo comenzó un 14 de enero de 2021, día en que fue al centro médico a realizarse un control de rutina y ocurrió un aberrante episodio según confirmó el tribunal. El lugar no contaba con la infraestructura ni los recursos indispensables para resguardar el pudor de la paciente. De acuerdo a lo que pudo corroborar la Justicia, tampoco había un biombo para que “pueda quitarse la ropa antes del examen y no se le entregó una bata para minimizar el impacto de la desnudez”.
A su vez, la jueza Mariana Wallace que dictó el fallo concluyó que la mujer fue víctima de un práctica abusiva por parte del médico debido a la “doble revisión genital, la extrema cercanía del rostro del médico a su cuerpo y la revisión simultánea de las mamas con una mano en cada una de ellas”.
+ MIRÁ MÁS: Convivía en Córdoba con su expareja, la violó mientras dormía y lo condenaron a ocho años de cárcel
Al testimonio de esta paciente se le sumaron otros de mujeres que atravesaron situaciones similares e incluso más gravosas. “Los denunciados no constituyeron un hecho aislado; sino que, por el contrario, fueron el resultado de la violencia estructural de género y de un patrón sociocultural justificado en el predominio masculino del profesional sobre el cuerpo de otras (mujeres), causándoles a sus pacientes sentimientos de humillación física y emocional, colocándolas en un plano de absoluta desigualdad. No las trató como personas”, indicó la magistrada Wallace.
Ante esta situación, el tribunal le ordenó al médico realizar un tratamiento psicológico obligatorio y pagarle a la paciente 336 mil pesos, que equivalen al valor de una consulta psicológica de 7 mil pesos cada 15 días por dos años de tratamiento.
La jueza hizo lugar al Tribunal de Ética del Consejo de Médicos de la Provincia de Córdoba para que determine si el médico denunciado trasgredió el Código de Ética profesional y si le corresponde alguna sanción.