Con un fuerte operativo de seguridad, 384 detenidos fueron trasladados este sábado a la mañana desde la Unidad de Contención del Aprehendido (UCA) hacia un nuevo pabellón construido en la cárcel de Bouwer.
La medida tiene como finalidad descomprimir el establecimiento de barrio Cáceres donde son alojadas personas arrestadas bajo custodia del Servicio Penitenciario, a la espera de una resolución de la Justicia sobre sus respectivas causas.
En febrero pasado se habían vivido momentos de tensión por una protesta de familiares de los aprehendidos que denunciaban las malas condiciones del lugar.
Durante las primeras horas del sábado, el Servicio Penitenciario con colaboración de la Policía realizaron el traslado de los detenidos a partir de la decisión del Ministerio de Justicia y Trabajo de la Provincia.
Desde esa cartera indicaron que los aprehendidos serán reubicados en un nuevo pabellón del Establecimiento Penitenciario N°1 “Reverendo Padre Francisco Luchesse”, en la localidad de Bouwer. Allí se construyeron 96 celdas, precisaron.
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Este lugar funcionará como apéndice de la UCA, cuenta con sus respectivos espacios comunes e incorpora 6.325 nuevos metros cuadrados al actual edificio de ese establecimiento.
El pabellón está conformado por dos plantas que incluyen sectores de requisa, áreas administrativas, técnicas, de educación, box de atención, salón de visitas, box de abogados y servicio médico, entre otras dependencias.
Las autoridades explicaron que una vez que el actual edificio de la UCA quede desocupado, “se procederá al reacondicionamiento de las instalaciones”. Del operativo de este sábado participó el interventor del Servicio Penitenciario, Gustavo Vidal Lascano.