En la zona comprendida por las calles Nazaret e Intendente Ramón Mestre, en barrio Escobar, se viven noches de terror. Los vecinos amanecen todos los días con un escenario desolador cuando salen de sus casas: los autos que duermen afuera están destrozados.
Los delincuentes actúan en modo piraña y atacan a los vehículos estacionados. Rompen las lunetas y les roban desde las ruedas de auxilio hasta cualquier otro elemento que encuentren a mano. Al día siguiente, las veredas quedan repletas de vidrios.
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Quienes viven en un complejo conocido, las principales víctimas ya no saben cómo pedir más seguridad y están con miedo porque hasta los guardias privados quedan expuestos. “Pasa todas las noches y ahora salen con armas y tiran disparos al aire”, lamentó una mujer que se animó a hablar en El Show del Lagarto.
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Aseguró que hay noches que los delincuentes que salen a robar en moto hacen ruido con los caños de escape. Esto despierta a los vecinos que empiezan a gritar desesperados y asustados y los niños no pueden dormir.
La situación es realmente preocupante. De hecho, en la madrugada de este miércoles detuvieron a tres integrantes de una banda, dos eran menores de 16 años y uno tenía 28 años. Las cámaras de videovigilancia del 911 registraron cómo los asaltantes destrozaban los vehículos con total impunidad hasta que un patrullero los emboscó.
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