“Estoy en el Cerro López, me cayó una avalancha y de pedo puedo respirar”. La desesperante frase es de Augusto Gruttadauria, el cordobés que estuvo horas sepultado en la nieve cuando fue a esquiar.
El joven de 30 años fue alcanzado por la masa fría el miércoles a la tarde y quedó cubierto a temperaturas bajo cero por horas. Con sus manos, logró hacer una burbuja para respirar y sacar su cabeza. Eso le permitió llamar al 911 y avisar que estaba vivo, aunque los rescatistas ya no tenían esperanzas. “De pedo puedo respirar pero tengo las piernas atadas”, le dijo a un primer operador.
+ VIDEO: el llamado al 911 del cordobés que quedó sepultado en la nieve (gentileza Diario Río Negro):
Ese telefonista lo derivó a Bariloche, lugar en el que se ubica el cerro, a más de 2 mil metros de altura, donde rápidamente avisaron a los equipos de rescate. “Hola, buenas noches. Me cayó un avalancha en el Cerro López, ¡por favor! Me esta agarrando hipotermia, hace 4 horas me cayó”, expresó desesperado.
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“De pedo puedo respirar porque hice un hueco”, advirtió e informó que estaba “en la cara derecha del refugio”. “Por favor, envíen a alguien, tengo frío”, suplicó. Del otro lado, los rescatistas ya iban en camino. “Gracias por atenderme, ojalá vengan, ojalá lleguen”, dijo casi con el último aliento que le estaba dando la esperanza de esa llamada.
La llamada quedó registrada a las 3 de la madrugada y el rescate se concretó alrededor de las 3:30. “Está consciente, lúcido y están completado los estudios. El objetivo es subir su temperatura”, indicaron fuentes del Hospital Ramón Carrillo al medio local Diario Río Negro sobre su salud.
“La persona era montañista, acostumbrada a estas actividades, por lo que pudo avisar”, aseguró un miembro del equipo de rescate al medio antes citado.