El hallazgo de un hombre muerto de un disparo en la cabeza causó conmoción en Río Cuarto y la Justicia reúne medidas probatorias para determinar qué sucedió. La víctima, Gabriel Russo (51), estaba sin vida dentro de un auto cuando vecinos alertaron la situación.
La autopsia confirmó que el fallecimiento se produjo a raíz de un traumatismo craneoencefálico por impacto de un proyectil de arma de fuego, indicó el fiscal Pablo Jávega. El funcionario a cargo de la investigación advirtió que hasta el momento no hay pruebas que le permitan sostener una hipótesis delictiva. No obstante aclaró que aún no se inclina por ninguna de las pistas en análisis.
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Russo era conocido en esa ciudad del sur de Córdoba por desempeñarse en la actividad financiera, además de haber sido dirigente de Estudiantes de Río Cuarto hace más de diez años.
El hombre fue encontrado muerto dentro de un Honda Fit el jueves alrededor de las 14:30 en un viejo camino a Córdoba, frente a la quinta del Colegio de Médicos riocuartense. Presentaba un balazo en la sien del lado derecho y si bien la primera teoría apuntó a un homicidio, esa posibilidad perdió fuerza y analizaban si se trató de un suicidio.
En el vehículo los investigadores observaron dos armas de fuego que fueron secuestradas. Por otra parte la fiscalía buscaba imágenes de cámaras de seguridad para intentar esclarecer lo sucedido, sumado a los testimonios que habían empezado a receptarse ni bien se conoció el fatal desenlace.