Este jueves habló el abuelo de Kim Gómez, la nena de 7 años que murió atropellada al intentar escapar del robo del auto de su familia en La Plata. Por el crimen detuvieron a dos adolescentes de 14 y 17 años. El mayor cuenta con antecedentes similares y fue entregado por su propia familia.
El cuñado del ladrón identificado como T.G. pidió la “pena de muerte”, y el padre, que lo puso a disposición de la Justicia, deseó que “se pudra en la cárcel”. A diferencia de ellos el abuelo paterno de la pequeña descartó la violencia y solicitó que se baje la edad de imputabilidad.
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“Yo creo que se puede achicar la edad para la condena. Nosotros somo una familia cristiana y como cristianos estamos en contra de la violencia. Tenemos un Dios que tiene misericordia de esas personas, si bien no podemos llamarlos personas con lo que hicieron“, expresó Roberto a la prensa.
Además, el hombre se refugió en la fe y manifestó su deseo de que estos casos no se repitan. “Sabemos que también la nena está en las manos de Dios“, dijo conmovido. Roberto también calificó a los menores acusado del asesinato como ”malas personas".
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Y continuó: “Se perdió la cuna, la casa, el respeto en el hogar. Las autoridades están atadas de manos, no pueden actuar. Las leyes protegen al que hace mal, no a la gente decente que trabaja. Somos como presas de esos lobos rapaces que te quitan la vida, arruinaron a la familia. Era nuestra princesa".
Por último Roberto reiteró que está en contra de una sanción extrema para los asesinos. “No pido pena de muerte. Como cristianos no queremos devolver mal por mal. Solamente Dios es el dador de la vida y de la muerte“, cerró.