Lucas es carpintero y Nicolás es panadero. Cuando se desató el feroz temporal en Bahía Blanca ambos tuvieron que dejar de lado sus profesiones y ponerse el overol de héroes. O mejor dicho, de ángeles en medio de la desolación.
Los enviados especiales de El Doce, Alejandra Bellini y Fido Cuestas, hablaron con los dos rescatistas de ocasión, que no dudaron en sacar la moto de agua para evacuar a los vecinos de los sectores más afectados de la ciudad del sur bonaerense.
+ MIRÁ MÁS: El drama en el hospital inundado: “La preocupación era para que los pacientes pudieran sobrevivir”
“Me levanté el viernes y me di cuenta que era un mar. Me di cuenta que la única manera de sacar gente era usando moto de agua. Nico tenía una y lo fui a buscar. Organizamos lista de prioridades con direcciones y arrancamos a las 10. Estuvimos hasta las 18 que perdimos profundidad de navegación”, contó Lucas.
Por su parte, Nicolás detalló la logística para salvar a la mayor cantidad de personas. “Todos querían ser rescatados. Nos organizamos para subir a la gente, rescatar de a uno. Muchas veces rompíamos vidrios, ventanas para sacar gente”, explicó.
Mientras Nicolás manejaba la moto, Lucas llegaba al lugar de evacuación, se bajaba para dejar su lugar al vecino de ocasión y esperaba la vuelta de su compañero. En total, fueron 40 personas rescatadas.
“Nos manejamos desde la calma, transmitirla. La clave era no desesperarte porque en el agua es lo peor. Él (por Nicolás) transmitía tranquilidad, yo tenía un buen capitán y sabía que siempre iba a volver”, contó Lucas.
En medio del operativo, el par de héroes actuó de manera mecánica, tal como lo definieron ellos propios. “Le decíamos a la gente que éramos rescatistas para que estuvieran tranquilos. Íbamos con seguridad, planeando cada movimiento”, indicaron, a la vez que reconocieron que ser vecinos de la zona les ayudó para ganar rápidamente la confianza. “Rescatamos hasta los perros y los gatos”, cerró Lucas.