Una madrugada violenta se vivió este sábado en Alta Gracia. A la salida de un boliche, un chico de 17 años fue víctima de una brutal golpiza de una patota y se encuentra internado en un hospital de la mencionada ciudad del interior provincial.
Familiares de la víctima hicieron público el episodio, mientras el joven está siendo sometido a estudios médicos y bajo tratamiento, con lesiones en el rostro y otras partes del cuerpo.
El ataque sucedió dentro del predio del boliche Güemes, según informó el medio local Mi Valle. El chico salió unos minutos antes de que termine la fiesta y estaba esperando a su papá que lo iba a buscar. En ese momento, fue interceptado por un ladrón que le exigió que le diera el celular.
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Su familia aseguró que no se resistió. Sin embargo, el delincuente empezó a pegarle. Detrás de él se sumaron al menos dos personas más, que también participaron de la golpiza. Lo dejaron malherido y también le robaron el celular.
La víctima fue asistida por otro joven que justo apareció en el lugar. Luego llegó el padre, que lo llevó de urgencia a un sanatorio del sector. Allí permanece hospitalizado, en observación y a la espera de una evolución.
Allegados al chico de 17 años lamentaron el hecho y se mostraron indignados porque sucedió dentro del predio del boliche. “No fue ni en la ruta ni afuera, fue adentro. No había seguridad privada, ni policía, ni nadie que pudiera intervenir. Una vergüenza”, dijeron al medio antes citado.
Y cerraron al respecto: “Esto no puede pasar más. Los chicos van a bailar y no sabés en qué condiciones vuelven. No hay seguridad, y nadie se hace cargo. Esto tiene que conocerse para que se tomen medidas reales”.