La Policía bonaerense encontró este martes por la tarde el cuerpo de Nicolás Tomás Duarte, el joven de 18 años que había desaparecido el sábado a la madrugada tras salir de un boliche en Ezeiza, durante la tormenta que afectó a gran parte del conurbano.
Duarte había ido a bailar el viernes por la noche al boliche Egipto, ubicado en la esquina de la colectora de la Ruta Provincial 205 y Sargento Cabral. Según registraron dos cámaras de seguridad, el joven salió del local caminando con normalidad, aunque bajo una intensa lluvia.
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Desde ese momento no se volvió a tener noticias suyas, y su familia radicó la denuncia por desaparición el mismo sábado por la tarde. La búsqueda se concentró en un arroyo cercano al boliche, donde finalmente fue encontrado el cuerpo.
Hallazgo en el arroyo Aguirre
De acuerdo con fuentes policiales, el operativo culminó este martes a las 16:50, cuando un equipo de buzos tácticos de la Policía de la Provincia de Buenos Aires halló el cuerpo en el arroyo Aguirre, en la zona de Ezeiza.
El cadáver fue localizado a la altura del cruce de las calles Hortensia y Tulipanes, entre ramas, basura y vegetación acumulada por la fuerte tormenta del fin de semana. Los rescatistas señalaron que la correntada habría arrastrado el cuerpo desde un punto cercano al boliche hasta ese sector.
Durante el lunes, bomberos y personal de Defensa Civil habían realizado rastrillajes sin resultados, ya que el cuerpo estaba “enganchado con algún elemento”. Con la bajante del agua registrada este martes, el cuerpo emergió y pudo ser detectado.
La hipótesis principal
Aunque la investigación continúa, las autoridades sostienen como hipótesis principal que Nicolás habría caído accidentalmente al arroyo al intentar regresar a su casa en medio de la tormenta. El lugar del hallazgo se encuentra a pocos metros del recorrido habitual que hacía para volver a su domicilio, ubicado a unos 25 minutos del boliche.