El fiscal Ernesto de Aragón, a cargo de investigar la muerte de una beba recién nacida en la Nueva Maternidad Provincial, pidió prudencia mientras avanzan las primeras medidas ordenadas tras la denuncia por presunta mala praxis presentada por la madre de la pequeña.
En diálogo con Arriba Córdoba, el funcionario judicial calificó el fallecimiento como “una muerte de etiología dudosa”, sostuvo que la causa se encuentra en una etapa inicial y remarcó que todavía no pueden dar información concluyente.
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De Aragón explicó que la denunciante —una joven de 20 años que ingresó para un parto natural y terminó en cesárea— aseguró haber recibido un “tratamiento que entiende que no fue el adecuado” y apuntó contra la intervención médica. Ante esto, el fiscal ordenó la autopsia, el pedido de la historia clínica y la individualización del personal que participó en la cirugía: “Tenemos un anticipo de los nombres, pero debemos corroborarlo”, dijo.
Además, indicó que los antecedentes serán analizados por un comité de mala praxis, como ocurre en casos de presunta negligencia médica: “Queremos brindarles a los médicos suficiente material para que puedan expedirse como corresponde”.
+ VIDEO: el fiscal que investiga la muerte de la beba no descartó otros casos:
Vale remarcar que la madre mencionó en su denuncia que habría conocido un caso más mientras estaba internada. El fiscal confirmó que ese dato se está indagando, pero aclaró que aún no tiene elementos sólidos para ampliarlo. “Por el momento no he recibido otro dato que permita afirmar más casos”, sostuvo.
La versión del entorno y del Ministerio de Salud
La familia de la beba cuestiona el desempeño del equipo médico y su abogado ya sugirió la posibilidad de un homicidio culposo, asegurando que hubo maniobras inadecuadas y personal sin experiencia suficiente.
En contraste, desde el Ministerio de Salud afirman que la intervención se realizó con médicos residentes bajo la directa supervisión de una ginecóloga con 18 años de trayectoria, niegan la presencia de practicantes y aseguran que la bebé ya no presentaba signos vitales al ser extraída del útero, pese a 40 minutos de maniobras de reanimación.
Por ahora, la causa avanza con “mucha cautela”, según señaló el fiscal, y se espera que los resultados de la autopsia y la historia clínica permitan esclarecer qué ocurrió dentro del quirófano.