La causa por la tragedia de las Altas Cumbres vivió este jueves un capítulo decisivo en los Tribunales de Villa Dolores. Las familias de Alejandra Bengoa —fallecida en el siniestro— y de Alexa y Marina, quienes sufrieron gravísimas lesiones, rechazaron de manera contundente la probation ofrecida por Oscar González, que incluía una indemnización superior a los 300 millones de pesos.
En una audiencia cargada de emociones, Nazzia González, la madre de Alexa, tomó la palabra dejó frases contra el ex legislador que resonaron en toda la sala. “No es un accidente, es un crimen vial”, comenzó diciendo. Y agregó: “A mi hija le provocó una lesión medular irreversible un irresponsable, cuando yo cuidaba a mis hijos como oro”.
Visiblemente afectada, la mujer cuestionó la oferta económica presentada por la defensa de González: “El abogado dice que nos ofrecen un monto de dinero justo. Me encantaría que estén todos en una silla de ruedas y me digan qué se siente”.
En otro momento, Nazzia describió el calvario que enfrenta su hija desde el choque ocurrido en octubre 2022: “Mi hija no siente frío, no siente calor. ¿Qué le espera? Diálisis en el futuro. Tiene riesgo de un paro cardíaco. Dicen que no es tan grave, pero mi hija no puede caminar, no puede vivir: sobrevive”.
También apuntó a la falta total de asistencia por parte del dirigente del peronismo cordobés: “Ni una curita, ni una bolsita de algodón, ni siquiera una pastilla. Nunca se acercó, no nos miró”.
Y lanzó una de las frases más crudas de la jornada: “El veredicto ha sido justo. Con dinero no nos va a callar la boca. Que me tase cuánto cuestan las piernas de mi hija, que tase cuánto cuesta su médula espinal”.
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La fiscal Analía Gallarato pidió que el expediente avance hacia juicio lo antes posible, al considerar que la probation sería una salida “inadecuada” para un hecho de semejante gravedad. González, bajo prisión domiciliaria, está imputado por homicidio culposo agravado y lesiones culposas agravadas.
La tragedia, ocurrida en el Camino de las Altas Cumbres, dejó como saldo la muerte de Bengoa y lesiones irreversibles en las dos adolescentes. Las familias insisten en que no se trató de un siniestro vial común, sino del resultado de una conducción temeraria.
“No vamos a parar, como madre no voy a parar”, afirmó tajante Nazzia entre lágrimas. “Hace tres años que tomo pastillas para poder estar en pie, pero no importa: por mi hija lo voy a hacer”, concluyó.