Este jueves por la tarde dos delincuentes ingresaron a una casa de los campings de Pérez, cerca de Rosario. Los ladrones redujeron al dueño de la casa y lo hicieron ingresar por la fuerza para exigirle dinero.
Los primeros datos señalan que la víctima forcejeó con los delincuentes y empezó a pedir ayuda a los gritos. En ese momento apareció su hijo con una escopeta en la mano y les ordenó que se tiraran al suelo.
Según las declaraciones recogidas por la Policía de Santa Fe, los ladrones desoyeron la advertencia y uno sacó un arma de entre sus prendas. Los vecinos afirmaron haber escuchado un disparo y luego vieron a uno de los asaltantes caído dentro del domicilio.
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El cómplice del delincuente herido logró escapar. Subió a un auto que lo esperaba cerca de la casa y se fugó por la ruta provincial 14 sin dejar rastros.
La fiscal que quedó a cargo de la causa ordenó peritajes a la Policía de Investigaciones y analiza si el disparo encuadra como legítima defensa de terceros, lo que permitiría liberar al joven en breve.
En la casa, los peritos secuestraron la escopeta calibre 12/70 usada en el hecho y una pistola calibre 9 milímetros que habría llevado el ladrón muerto, cuya identidad aún no fue informada.