Apenas pasados unos minutos de la 1 de la madrugada, un video introductorio en blanco y negro con imágenes de los tres líderes y distintos momentos de la historia de la banda marcó el inicio de la última gran noche de La Barra.
Al ritmo de Dime qué haré y visiblemente conmovido, Javier “La Pepa” Brizuela abrió el show que quedará en la memoria como el cierre definitivo de una de las agrupaciones más emblemáticas del cuarteto.
Entre éxito y éxito comenzaron a llegar las sorpresas. Desde Río Cuarto viajaron Lucho Castro y Marcos Gómez para representar a Banda XXI en la velada histórica. Junto a La Pepa interpretaron Amor infiel y despertaron la ovación de los barrabaleros.
El segundo en subir fue Lisandro Márquez, quien compartió Aventurera con Brizuela, regalando un momento único. La fiesta también recibió a Martín Pampiglione y Juan Taleb, de Los Caligaris, confesos fanáticos de La Barra que ya habían contado en el streaming Viva La Pepa su admiración desde la adolescencia.
Las visitas no terminaron ahí: Magui Olave volvió a compartir escenario con Javier en Así no te amará jamás, como ya lo habían hecho días atrás en un streaming en el canal de la cantante. Más tarde fue el turno de DesaKta2, con Fer Olmedo y Joaco Martín haciendo delirar al público. Fer interpretó Te felicito junto a La Pepa, mientras que Joaco dejó una emotiva versión a dúo de Ya no somos ni seremos.
La lista de colegas que se sumaron incluyó también a José Sarmiento, Los Herrera, Monada y el Turco Oliva, todos parte de una celebración que reunió a diferentes generaciones de la música popular cordobesa.
El turno de los Ex’s
La nostalgia se hizo presente cuando comenzaron a aparecer los históricos que pasaron por la banda. El Titán González fue el primero en hacer viajar en el tiempo a los miles de barrabaleros presentes. Con asistencia perfecta en las tres funciones, Chocolino Juárez volvió a subirse al escenario, brindando toda su energía. Tras cantar, se emocionó hasta las lágrimas y dedicó palabras sentidas a sus ex compañeros y a La Pepa.
El broche de oro de este segmento estuvo a cargo de Dani Guardia, una de las visitas más esperadas que generó expectativa hasta último momento. Por un instante, el Quality se transformó en aquellos recordados bailes de Villa Retiro, donde entre baladas y cumbias La Barra consolidó su lugar como leyenda del cuarteto.
La noche cerró con un fundido abrazo entre La Pepa Brizuela, Carlos De Piano y Adrián Moyano, símbolo del final definitivo de un ciclo. La Barra bajó el telón y se posicionó para siempre como una de las leyendas más grandes del folklore cordobés.
Un repaso de la primera noche
La despedida había comenzado con una triple fecha a sala llena. En la primera jornada la banda abrió, al igual que las noches siguientes, con Dime qué haré y todos sus músicos sorprendieron en el escenarios con un vestuario formal para la ocasión.
A pesar de la fuerte lluvia, los seguidores no faltaron a la primera cita y acompañaron cada canción en una noche cargada de emoción que quedó marcada como el inicio del adiós definitivo tras más de 30 años de historia. Los invitados que llegaron a esta jornada de apertura fueron Facundo Toro que interpretóUn millón de rosas y Vane Velazquez quien se lució con Ni tú ni yo.
La segunda
El sábado, el clima acompañó de otra manera y permitió que el público disfrute de un show más cómodo. El repertorio fue el mismo del viernes: 40 canciones que recorrieron gran parte de la carrera de La Barra, con versiones originales de sus clásicos más recordados.
La noche incluyó un momento especial cuando los protagonistas celebraron con una torta decorada con todas las tapas de los CD’s de la banda, gesto que despertó los aplausos y la nostalgia. El estadio volvió a colmarse y se vivió una fiesta cargada de alegría, pero también de preparación para lo que sería la función más dura: la despedida final.