El Día de la Madre es una fecha especial y crucial en la vida de Euge Quevedo tanto por su rol como mamá de Helenita pero también al no tener físicamente a la suya. En el marco de la fecha, la artista recibió a Cuarteteando en su casa para compartir recuerdos y rememorar anécdotas junto a su mamá.
Ante una caja llena de fotos que se trajo de la casa de sus padres, la Muela repasó las imágenes para refrescar viejos momentos de la mano de sus seres queridos, su infancia y otras anécdotas que fueron apareciendo en la charla con la Negra Ludueña.
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“Mi mamá era muy cariñosa, era acostarse conmigo en las noches, contarme cuentos y jugar. Tengo recuerdos muy lindos de mi infancia junto con mi mamá y papá”, comentó desde el living de su casa, mientras repasaba cada álbum. Consciente de lo importante que fueron para ella, Euge contó que esas situaciones simples trata de repetirlo con su familia y de cierta manera poder “continuar con la herencia” con Helenita.
Llevar una vida de artista no es para nada fácil y mucho menos para una mamá que se debe adaptar a los horarios propios como de quienes la rodean. Por suerte para la Muela, Hele desde un principio se acostumbró a su rutina ya que desde su embarazo ella siempre estuvo en los escenarios.
A pesar de los viajes y su agenda, Euge trata de conservar y acomparñar a su hija en los momentos importantes y también en los más simples, como buscarla del jardín.
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Fiel compañía
En cada oportunidad que tuvo, Euge siempre remarcó el apoyo incondicional que recibió de sus padres, quienes la incentivaron para su camino en la música, principalmente de su mamá. “Siempre fue de acompañarme con el canto y la danza”, contó.
Con respecto al canto, la Muela mencionó que fue su madre la pesona que la motivó a capacitarse y tomar clases para estar preparada en un futuro, que por suerte llegó y lo disfruta a pleno. Tal era el apoyo que recibía que hasta se dedicaba a crearle los vestidos para cada una de sus presentaciones que transitó en su infancia. “Son de las ausencias que más me cuestan. Siento que hoy podría mimarla y estar desde otro lado”, expresó emocionada.
Para su madre, la opción de viajar a Buenos Aires e instalarse era una etapa fundamental y que debía aprovechar al máximo. A tal punto que llegó a pedirle que “no se vuelva nunca”, ya que entendía que estar en ese lugar le permitiría aprender y desenvolverse en el ambiente.
Ese mensaje la acompañó por mucho tiempo a la cantante que hasta en diversas situaciones le impidieron tomar decisiones o la hacían demorar o postergar. Al tiempo recibió la propuesta formal de sumarse de manera oficial a la LBC, que si bien su presente en la banda refleja que fue totalmente acertado, en ese entonces no fue tan fácil. “Me costó horrores”, mencionó teniendo en cuenta que ella estaba viviendo en la capital.
Mientras repasaba imágenes cargadas de recuerdos, Euge contó que su mamá era una persona de perfil bajo, aunque cuando hacía sus presentaciones en competencias o realities se encargaba de contarlo a vecinos y amigos sobre el accionar de su hija. “Estoy segura que ella andaría golpeándose el pecho por todo el barrio. Muy orgullosa de su hija”, afirmó con respecto a su presente al lado del Keso.
Euge Quevedo reveló distintos momentos de su vida con su mamá y hasta compartió uno de los sueños que le quedaron pendiente, aunque de cierta forma los pudo concretar con su hija. “Ella soñaba con ser cantante cuando era joven. Se paraba en una mesa, se pintaba un lunar (en la mejilla), te lo juro”, contó.
“Lo que más extraño de ella es poder disfrutar este momento con ella, porque ella fue la que me acompañó en todo”, expresó conmovida.
Cada vez que la cantante recuerda a su mamá, siempre lo hace con orgullo y mucho amor, tanto arriba como abajo de los escenarios. Actualmente en su etapa como mamá de Helenita y Quimy, su segunda hija del corazón a la que “adoptó” como una integrante más de su familia. “Ahora entiendo muchas de las cosas que me decía ”cuando seas mamá vas a entender”, cerró con lágrimas en los ojos y deseándoles un feliz día a todas las madres en su día.