La mesa de Almorzando con Juana tuvo una de las combinaciones más impactantes del año: La Mona Jiménez, Luck Ra, el Mono de Kapanga y el Oficial Gordillo. Un cruce que despertó expectativa entre cuarteteros y fanáticos de todo el país.
Apenas inició la charla, el Mono de Kapanga —fan confeso del tunga tunga— destacó la magnitud del encuentro: “Juana, lograste algo que se da pocas veces: tener al máximo exponente de un ritmo popular con el más joven de esa movida”.
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El Mandamás tomó la palabra y dejó una declaración que conmovió a toda la mesa.“Es la nueva generación del cuarteto. Le está yendo bien y va a seguir triunfando porque es buena persona y buen pibe. Yo estoy acá porque está él, el Mono de Kapanga y Gordillo que me cago de risa”, dijo entre sonrisas.
Para Luck Ra, que atraviesa un presente arrasador a nivel nacional e internacional, el momento fue inolvidable.“Que crossover hermano eh, que honor esto”, expresó el cantante, visiblemente emocionado tras cantar con su ídolo.
Un repaso por su vida, su historia y su amor
Además de la música, Jiménez se abrió como pocas veces y recorrió pasajes fundamentales de su vida. Contó cómo empezó en el arte bailando malambo, recordó que su apodo nació cuando soñaba con ser Tarzán pero terminó siendo “la Mona Chita”, y relató momentos difíciles de su infancia.
También cocinó almejas rellenas junto a Juana Viale y compartió recuerdos con el Mono de Kapanga cantando en Quilmes Rock, festivales y hasta en la cancha de River que hicieron reír a toda la mesa. “El culpable de que tenga una banda y sea cantante es este señor”, expresó el Mono en honor a su ídolo.
Uno de los momentos más emotivos fue cuando habló de cómo conoció a su esposa, Juana Delseri. Recordó que recién le habían dado el alta tras cinco meses en coma y que, durante una rehabilitación, la vio en un evento y pidió que le “hicieran la pata” para conquistarla. La primera cita incluyó un auto roto, una caminata obligada, un lomito… y un pedido de dinero que, según bromeó, “ella todavía me reclama”.
Un cierre a la altura del Mandamás
La Mona coronó la visita con un cierre musical único que dejó la vara altísima y reafirmó por qué su figura sigue siendo el corazón del cuarteto argentino. Jiménez cantó su clásico como Beso a beso, El Marginal, Me Mata junto al Mono de Kapanga, y Quien se ha tomado todo el vino junto a Luck Ra.