Como sucedió con las computadoras, el crecimiento del número de usuarios de teléfonos no tiene barreras y, con eso, se hace inevitable que circulen amenazas y aplicaciones maliciosas para robarnos información. Nuestras cuentas bancarias, tarjetas, contraseñas y mucho más pueden estar en riesgo si no se toman recaudos.
El sitio especializado El Androide Libre publicó cuatro consejos claves para evitar que nuestro teléfono se infecte o se vea amenazado. A tomar nota:
- No permitir usos no autorizados: usar sí o sí un patrón, PIN o contraseña para el acceso. Además, hay que tener cuidado al conectarlo vía USB: es conveniente activar el modo "solo carga" cuando lo enchufemos y no estemos intercambiando archivos.
- Mantener Android actualizado: como ningún sistema operativo es totalmente seguro, instalar actualizaciones oficiales ayudará a evitar filtraciones. "No sólo debes cuidar las actualizaciones del sistema: las aplicaciones son igual de importantes", aclara el sitio. Solo basta con activar la opción "actualizaciones automáticas" en la tienda de Google.

- No utilizar aplicaciones antivirus ni descargar apps sospechosas: en Android, los antivirus son inútiles y consumen muchos recursos. "Si seguimos los siguientes consejos, no los necesitaremos para nada: no instalar apps pirateadas o de sitios extraños y solo usar Google Play.
- Tener conexiones de Internet seguras: navegar solo en páginas web seguras, que tienen la sigla HTTPS. "Evita siempre que sea posible las redes WiFi abiertas y sin protección, por muy tentadoras que sean: amigos de lo ajeno pueden estar conectados, o incluso que la propia red WiFi sea una trampa para incautos", detalla el portal.