El robot entró por un agujero en la capa de hielo de un metro de espesor. Había sido enviado para investigar los efectos del cambio climático. Sin embargo, encontró un mundo poco explorado lleno de colores sorprendentes.
La cámara capturó imágenes de esponjas, arañas marinas, pepinos de mar, gusanos, algas y estrellas de mar de todos los colores imaginables.
La flora y fauna prosperan porque las gruesas capas de hielo las protegen de las inclemencias climáticas extremas, que hay en la superficie.
El resultado fue tan inesperado que el Gobierno australiano decidió compartir estas bellas imágenes. Video
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