Dime cómo es tu mascota y te diré cómo eres. Así podría rearmarse el dicho popular tras el estudio científico de la Universidad de California, Estados Unidos, que descubrió por qué los perros se parecen a sus dueños.
Nicholas Christenfeld, investigador del prestigioso centro de estudios, sacó fotos de perros y dueños por separado y se las mostró a distintas personas, que debían "unir" a los animales con sus dueños. El porcentaje fue contundente: el 66 por ciento de los casos dio la "unión" correcta.
En primer lugar, Christenfeld afirmó que tendemos a elegir mascotas que se parezcan a nuestra personalidad. "Una persona agresiva se sentirá reforzada con una mascota de una raza potente como un Rottweiler o un Pitbull", explicó.
Además, y más interesante, es que los perros adquieren los hábitos de sus dueños y se mimetizan si son criados desde cachorros. “El cómo se comporta un perro depende en un 20 por ciento de la genética y en un 80 de los aprendizajes junto a su amo", indicó el especialista.
"El perro tiene estructuras en el cerebro más desarrolladas que otras especies, lo que le permite interpretar y responder frente a emociones de sus dueños. Esto genera que pueda expresar con lenguaje corporal una respuesta frente a la emoción de su amo", cerró Sylvia Arrau, otra de las investigadoras que realizó el estudio. ¡Guau!