Una historia poco común con un final extraordinario. Cody Harman, tiene 30 años, vive en California, Estados Unidos, y su vida cambió de un día para el otro. Hoy claramente es un hombre, el nombre lo dice todo, pero hace tiempo atrás era una novia delicada y enamorada.
Hace tres años atrás se casó con quien consideraba que iba a pasar toda su vida. Sin embargo, nada de eso ocurrió, porque si bien era una mujer, sentía que era gay porque le gustaban las personas de su mismo sexo.
Por eso, el matrimonio duró poco y nada. Desde ese momento comenzó a hacer el cambio que tanto deseaba. En 2014 pasó por una doble mastectomía. Luego empezó con un tratamiento de tetosterona.
Esta transformación fue realmente increíble porque le permitió competir en un concurso de fisicoculturismo para hombres trans. A través de las redes sociales compartió cómo se veía antes del tratamiento.