Una peculiar historia se esconde detrás de una casa ubicada en la localidad de Leeds, en el norte de Inglaterra. Está en venta desde hace tres años a un precio muy competitivo por su comodidades. Sin embargo, un dato ahuyenta a todos los interesados.
La propiedad se publicó por primera vez en 2017 y nunca tuvo posibles compradores. A pesar de tener un precio por demás accesible (100 mil libras, algo así como 130 mil dólares), el monto no atrae y fue rebajado más de una vez.
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La casa tiene dos plantas, tres dormitorios, un pequeño terreno adelante y un patio trasero con el jardín. Ahí está el detalle, porque es donde está enterrado el cuerpo del anterior dueño.
“Tenga en cuenta que esta propiedad está siendo vendida por miembros de la familia como parte de una propiedad de parientes”, señala el cartel de exposición del inmueble.
La agencia inmobiliaria Manning Stainton advirtió: “Era el deseo del difunto ser enterrado en el jardín ya que nació y murió en la casa. Este deseo se ha cumplido y la propiedad se venderá como está”.