El cuento de la Cenicienta es uno de los más conocidos en todo el mundo y el momento en que la joven huye del baile a las 12 de la noche y pierde el zapatito de cristal para que el príncipe azul la pueda encontrar, cambiaría.
Por eso Mandy Pursley armó un disfraz del mítico personaje, pero con un cambio fundamental, una prótesis de cristal en el brazo. La versión de esta Cenicineta inclusiva, se hizo viral en las redes sociales.
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La mujer contó: “Cenicienta ¡con un brazo de vidrio!. Si alguna vez hubo un disfraz que fue un trabajo de amor, ¡fue éste!. Cuando mi hija estudiaba cuentos de Cenicienta en la escuela el año pasado me di cuenta de que aunque había tantos cuentos hermosos de todo el mundo, ¡todavía no había princesas que se parecieran a mí!", escribió en su cuenta de Facebook.
Pursley, además afirmó que cuando era chica no había mucha representación para personas diferentes como ella que no tiene brazo, pero que como cualquier niña sueña con ser una princesa.
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"Cuando yo estaba creciendo, con una diferencia física, nunca vi a chicas como yo representadas en los medios de comunicación. Me llevó mucho tiempo darme cuenta de que lo que nos hace diferentes también puede ser lo que nos hace fuertes, hermosas y únicas sin pedir perdón”, agregó.
Por eso, realizó el traje de Cenicienta con el brazo de cristal para todas aquellas personas que tienen alguna dificultad. También hizo el del príncipe, interpretado por su marido y recrearon en fotos el mítico cuento.