Keely Favell pensó que estaba engordando y los médicos creían que estaba embarazada. "Mirándome, cualquiera hubiera pensado que estaba de nueve meses. No era la primera vez que me confundían con una futura mamá", le contó a los medios de su país.
La joven de 28 años de edad sintió los primeros síntomas en 2014. El quiste de ovario creció a una increíble velocidad y era equivalente al peso de un niño de siete u ocho años.
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El quiste fue descubierto cuando le hicieron una ecografía. "Estaba con mi esposo cuando el radiólogo movió la sonda sobre mi abdomen. Vi que sus ojos se abrían con horror, pero la pantalla estaba en blanco. Algo estaba mal ", relató.
Ahora, la joven inglesa sigue recuperándose. "Me explicaron lo grande que era. No podía creer que había estado caminando tanto tiempo llevando a este alienígena", dijo aliviada.