Pamela tiene 46 años, es madre de dos hijos y vive en Estados Unidos. Luego de su segundo embarazo, notó extraños bultos en la piel de su nariz que con el tiempo se fueron amontonando y la hicieron crecer sin control.
En una entrevista, la paciente contó que probó con medicamentos y luego con cirugía láser pero todo empeoró. "Cuando tenía 15 años mi piel era hermosa, y mi nariz era de tamaño normal", señaló la mujer en el programa “The Doctors” de la cadena CBS.
Su historia también fue difundida por la revista People. "Cada vez que me miro al espejo, algo cambió en mi rostro. Mi nariz es tan grande que me avergüenza", se lamentó.
Según los dermatólogos consultados, la rinofima es una patología de la piel de la nariz consistente en una hipertrofia de las glándulas sebáceas locales que conlleva una deformación característica y no tiene cura.
Si embargo, Pamela no se da por vencida y probará otra cirugía plástica para intentar combatir este raro mal.