Parece que no fue hace tanto cuando se viralizó por Twitter la anécdota de una usuaria donde contaba lo que había vivido en su primer trabajo: “Mi primer trabajo en una oficina, un compa me pide que le alcance los remitos (yo no sabían qué eran), le llevé los palitos para revolver el café (porque tienen forma de remos chiquitos), toda la ofi se me cagó de risa. Al día siguiente renuncié por teléfono por vergüenza”.
Rápidamente la publicación recibió miles de me gusta y compartidas a tal punto que se convirtió en un ícono de la red social. A pesar de que pasaron 4 años, cada tanto se remota el tuit y los usuarios se suman compartiendo sus malas experiencias en los primeros trabajos.
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Celeste Busson Ibarra, la protagonista de la historia, habló con Seguimos en El Doce y contó cómo sucedió todo y qué es de su vida ahora. “Acá estamos riendo después de que pasaron 22 años de esta anécdota. Fue en mi primer trabajo de oficina. Yo había hace poco del secundario y fui a hacer el reemplazo a una oficina muy aburrida”, comentó
Y agregó: "Claramente no eran lo mío los trabajos de oficina. El tuit lo escribí hace cuatro años y cada tanto se remonta. No sé bien porque y eso me da mucha gracia y me da alegría lo que escribe la gente”.
En la actualidad, Celeste se dedica a algo que “nada tiene que ver con remitos”. Es profesora de idioma sueco y tiene un emprendimiento de cerveza con su esposo. Pero la historias divertidas de su vida no se terminan solamente con el hecho de ser “la chica remito de Twitter”.
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La joven también se hizo conocido por haber compartido unos mates con el grupo musical Abba. "Soy fan del grupo hace muchos años y eso fue lo que la motivó a estudiar sueco y tuve la oportunidad de conocerlos”.
Sin embargo, ella aclaró sobre esa historia: “Yo no tomé mate con Abba, pero les regalé un equipo de mate a los integrantes del grupo cuando fui a la inauguración de su museo en Estocolmo en 2013”.
“Uno de ellos después me escribió por mail agradeciéndome y preguntándole donde podía comprar yerba. Claramente me pasaron estas cosas porque no me dediqué a los remitos”, cerró.