Nacieron en marzo y ya tienen tres meses. Nacieron unidas por la cadera pero la tecnología pudo separarlas. Un equipo de 10 médicos trabajó durante días para perfeccionar la técnica que les permitiera desunir la parte más baja de la espina dorsal y separar el final del intestino grueso.
La tecnología de las impresiones en tres dimensiones les permitió crear modelos para que los médicos practicaran la operación y perfeccionaran la técnica. Es por eso que el Hospital Infantil de la Universidad de Fudan contrató a una empresa de impresiones 3D para construir los modelos de las distintas partes del cuerpo que comprartían ambas niñas. Esta técnica permitió planificar detalladamente la intervención. Lograron operar de manera virtual previo a la cirugía real.
"con un modelo en 3D pudimos comprender mejor la estructura anatómica"
Las siamesas estuvieron cinco horas en el quirófano. Allí les separaron los cuerpos, el sistema nervioso y tuvieron que reconstruirles el año. El cirujano jefe y experto en cirugía pediátrica Zheng Shan fue quien encabezó el equipo de trabajo y explicó que "con un modelo en 3D pudimos comprender mejor la estructura anatómica de las partes que compartían las siamesas, y eso nos ayudó a decidir un punto de inicio de la operación más preciso"