El bar se llama Alcoholic Architecture y se ubica en la zona del Borough Market. En el lugar podes respirar tragos, cocktails o cervezas y también tenes la opción de una nube sin alcohol.

La gran diferencia entre tomarlo y respirarlo es que directamente se mete en el torrente sanguíneo salteando el hígado, explicó el dueño del local.
La entrada cuesta 15.60 dólares en los horarios más concurridos y la experiencia dura unos 50 minutos.

"Adentro, el sonido es modulado, para que parezca que uno se encuentra de verdad dentro de un vaso". Es una atmósfera densa que se convierte en una tormenta eléctrica con relámpagos. Es una nueva manera de experimentar los tragos, y es social porque es un ambiente de inmersión compartido. Todos comparten la misma sensación de sabor", dice uno de los responsables del lugar.

Aseguran que se logra consumir un 40% menos de calorías y sentir los mismos efectos que al beber.