La ministra de Seguridad Patricia Bullrich había advertido que “el que las hace, las paga” y ahora ordenó aplicar el derecho de admisión a 57 barras de Boca. La medida alcanza a Rafael Di Zeo, el líder de La Doce. Esto se da a una semana del secuestro de armas durante un operativo en la autopista Córdoba-Rosario el pasado martes en la previa al partido ante Estudiantes de La Plata por la Copa de la Liga en el estadio Kempes.
A través de la resolución 327/2024 publicada en el Boletín Oficial, Bullrich le prohibió el ingreso a los estadios con un agregado jugado: será por tiempo indeterminado. Consideró que la “conducta desplegada” por los barrabravas de Boca fue “temeraria y violenta”, por lo que dispuso aplicar la figura de “restricción de concurrencia administrativa a todo evento deportivo en todo el territorio nacional por tiempo indeterminado”.
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Di Zeo y los otros 56 simpatizantes están imputados por tenencia ilegal de armas de fuego con motivo de un espectáculo deportivo. Cabe recordar que en uno de los cinco colectivos en los que se trasladaban para presenciar el partido en el Kempes, personal de Gendarmería Nacional y de la Policía de la Provincia hallaron cuatro armas, una de ellas escondida dentro de una media en el sistema de aire acondicionado.
La defensa de Di Zeo
De acuerdo a lo que trascendió, el líder de La Doce se subió a un auto y se fue en medio del operativo. Sin embargo, en diálogo con Arriba Córdoba su abogado Diego Storto desmintió a la ministra Bullrich y dijo que “es falso” que se haya fugado. Insistió en que su defendido no iba en esos colectivos y que “las armas tienen responsables”.
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Además, aseguró que el “jefe carismático”, tal como lo describió, llegó a Córdoba en un auto y cuando observó el operativo policial a la altura del peaje de Toledo “se bajó” porque “cuando hay un problema con los micros es el que baja a ver qué pasa”, habló con los policías y “retó a las personas que llevaron las armas”. Luego Di Zeo “emprendió la vuelta por un problema de salud de una persona íntima, no se profuga”. “Cuando emprende la vuelta es en el medio de un operativo”, remarcó Storto.
Qué hallaron en uno de los coches
De acuerdo a lo que consta en los considerando de la resolución 327/2024, Gendarmería Nacional y Policía de la Provincia de Córdoba detuvieron aquel 30 de abril cinco colectivos que trasladaban a la parcialidad radicalizada de Boca.
Luego de las requisas, secuestraron de adentro de una de las unidades “una pistola 9 mm, marca Browning, sin numeración visible, con inscripción en la parte de la corredera “Policía Federal” con su logo, con 23 proyectiles dentro de 2 cargadores, que se encontraban ocultas dentro de una prenda (media) en el sistema de calefacción, a la altura del asiento número 38″.
También hallaron otras tres armas, que según describieron eran “una pistola Bersa calibre 22 con 7 proyectiles en su cargador y 8 proyectiles sueltos dentro de la media, un revólver calibre 32 largo marca Doverman con 7 proyectiles colocados en su tambor y una pistola Browning 9 mm con numeración suprimida, con cargador conteniendo 6 proyectiles”. “Todo ello con claro objetivo de que las Fuerzas de Seguridad no percibieran las mismas”, concluyeron.
Conferencia de prensa
La ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y su par provincial Juan Pablo Quinteros, dieron a conocer detalles de la prohibición de ingreso a todo evento deportivo de los barras de Boca, incluido Di Zeo. La conferencia de prensa se realizó en Buenos Aires y contó con la presencia del director de Eventos Deportivos, Franco Berlín.
Bullrich calificó el intento de ingresar con armas al Kempes como un hecho de “extrema gravedad” y destacó el accionar de Gendarmería Nacional y de la Policía de Córdoba por el operativo en la previa y durante el partido: “Fue ejemplar”.
“La sanción que se aplicó es tan dura como duro fue el descubrimiento de cuatro armas embutidas. Sin duda que hay una acción delictiva premeditada”, sostuvo la funcionaria nacional.
En ese sentido, insistió en que las personas que pusieron las armas en el techo del colectivo lo hicieron “con una anuencia, colaboración de quienes son dueños de esos micros” y sostuvo que “demuestra que había una decisión concreta de llevarlas a la cancha”.
Además, afirmó que “Di Zeo viajaba en el ómnibus, desapareció, se fue a una estación de servicio y de ahí se rajó, pero nosotros lo tenemos filmado”. Y cerró: “Podrán ir a la Justicia las veces que quieran que nosotros vamos a seguir duros impidiendo que en las canchas lleguen estas armas”.