Julián Álvarez y Emilia Ferrero anunciaron al nuevo integrante de la familia con un tierno posteo que causó sorpresa en Instagram. La pareja cordobesa adoptó un perro y le puso de nombre Tarzán para cumplir la promesa que hicieron si Argentina se consagraba Bicampeón de América.
Las postales del cachorro albino cautivaron a todos en la red social. En una de las fotos se lo pudo ver al can en brazos de Julián y Emilia y otra de las imágenes capturó un divertido momento de juego entre el futbolista y Tarzán. Pese a la ternura se generó un debate en cuanto a la raza de la mascota.
Tras la viralización de las dulces fotos algunos usuarios de la red social confundieron a Tarzán con un chow chow. Luego se supo que se trata de un samoyedo cuyo valor ronda entre los 1.000 y los 1.500 euros, unos 1.603,618.50 pesos argentinos.
Esta confusión es muy casual ya que las razas son parecidas e incluso existe una teoría que asegura que el chow chow es un cruce entre el samoyedo de Siberia y el mastín del Tíbet . Sin embargo, los expertos creen que la lengua azul-negra del primero contradice esa versión.
La principal diferencia entre estas dos razas está en la forma de las patas y la cola. Los chow chow tiene patas pequeñas y su cola se enrosca sobre la espalda mientras que los samoyedo tiene las patas grandes y ovalada y su cola es más más larga.