La lucha contra la adicción a las drogas de Brian Fernández sumó un nuevo capítulo. El hermano de Uvita grabó un video para comunicar que no seguirá en Coquimbo de Chile, equipo con el que había firmado contrato hace apenas 14 días.
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“Quería comunicarles que me quedaré en Argentina. Es medio loco, pero lo que necesito es estar más cerca que nunca de mi familia. Estoy muy feliz de poder decirlo. Hoy puedo dar la cara y decir que tengo que dar un paso al costado para estar bien conmigo y seguir creciendo en mi vida personal”, explicó mirando fijamente a la cámara.
Y agregó: “Estoy muy agradecido al equipo por haberme contratado y confiar en mí, pero he tomado la decisión de no regresar. Quiero agradecerles al presidente, a su qrupo de trabajo, al profe y a los jugadores por brindarme lo mejor en estos diez días que estuve. Espero que tengan un buen año”.
El último equipo en donde había estado el hermano del delantero de Belgrano fue Almirante Brown, en donde el técnico por aquel entonces, Daniel Bazán Vera, lo acogió en su propia casa para contenerlo. Aún cuando dejó su cargo, el “Indio” lo mantuvo a su lado para cuidarlo.
Una dura historia
Brian Fernández nació en el seno de una familia humilde de Santa Fe capital. Tiene nueve hermanos, de los cuales tres son futbolistas: Leandro juega en Universidad de Chile, Nicolás, alias “Uvita”, en Belgrano y Juan Cruz Villagra (apellido de la madre) en Excursionistas.
Lamentablemente, en 2012, Brian sufrió la pérdida de su hermano David, que se pegó un tiro después de sufrir un grave accidente en moto.
En 2015, cuando estaba en Racing de Avellaneda, se conoció su problema de adicción a las drogas. Fue suspendido tras un control que dio positivo de cocaína. Estuvo un año y medio sin jugar y pasó por el fútbol francés, chileno y mexicano. De ahí fue a Portland Timbers de Estados Unidos, pero sus inconductas reaparecieron.
En 2020 se sumó a Colón de Santa Fe. Fue cedido a Ferro, donde la “rompió”, pero faltó a los entrenamientos en el tramo final del campeonato y recaló en Deportivo Madryn. En el club del sur tuvo una recaída y fue internado en una clínica para tratar su problema.
Volvió al equipo de Caballito y en octubre de 2022 quedó hospitalizado por un cuadro de brote psicótico. Regresó al Sabalero y Néstor Gorosito le dio una nueva oportunidad tras asumir como entrenador, pero le bajó el pulgar tras ausentarse a las prácticas.
También estuvo en Deportivo Madryn y en Morelia de México, para recalar en Almirante Brown, su último equipo antes de Coquimbo.