El juicio por la muerte de Diego Armando Maradona tiene muchas audiencias por delante que irán revelando lo que le pasó al 10 en sus últimos días de vida. En la jornada de este miércoles el dueño de la vivienda del barrio privado San Andrés, donde se instaló para recuperarse, reveló detalles del acuerdo y del estado de la propiedad.
Santiago Giorello dio su declaración y aseguró que entregó la casa “en perfecto estado”. “Hubo alguien de limpieza hasta el último minuto”, sostuvo y siguió: “El día 19, cuando fui a buscar mis cosas, había mucho despliegue de gente, muchos muebles”.
Según dijo, regresó a la casa en diciembre, cuando Diego Maradona ya había fallecido, y lo que encontró lo dejó sin palabras. “Cuando logré que me la devolvieran y pude entrar, la casa estaba en condiciones deplorables”, lamentó.
+ MIRÁ MÁS: La lapidaria indirecta de Messi a Brasil luego de la paliza histórica
Otro punto llamativo en la declaración de Giorello fue cómo se enteró de que el inquilino sería el astro argentino: “Me enteré el mismo 9 de noviembre (día en el que entregó las llaves)”. “Mi mujer me dijo ‘no le va servir la casa porque seguro viene con mucha gente’ y Jordan (de la inmobiliaria) nos dijo que venía en plan de recuperación, con sus hijas”, recordó.

El hombre comentó que entregó dos juegos de llaves y volvió una vez más a la propiedad, el 10 de noviembre, para retirar pertenencias y su mascota. El 11 del mismo mes redactó un comunicado destinado a la administración para informar que allí viviría Diego Maradona hasta el 31 de enero, según estaba previsto con la inmobiliaria.
“En ese comunicado se informó que una ambulancia iba a permanecer siempre, que fue lo que se nos comunicó a mi mujer y a mí. Pero desde el 10, día en que dejé la casa, debo haber ido dos o tres veces y nunca vi una ambulancia”, concluyó Giorello.