Unos 500 hinchas observaron la práctica de Boca en el estadio Mario Alberto Kempes. En principio iba a ser a puertas cerradas, pero un pedido de "El Apache" a su técnico cambió los planes.
Grande fue la sorpresa para los xeneizes. Solo esperaban ver pasar el colectivo con sus ídolos, pero apareció un guardia y les dijo que pasen.
Muchos llegaron en familia y aprovecharon para ver a los jugadores desde la popular, donde anoche sufrieron los piratas.
Boca se quedó en Córdoba porque el miércoles juega en Formosa contra Banfield, por los 16avos de la Copa Argentina.
La noticia corrió entre los simpatizantes y muchos se hicieron tiempo para ver a sus ídolos de cerca, saludarlos y algunos hasta se sacaron fotos y pidieron autógrafos.