150 millones de euros. Esa cifra es la que, supuestamente, Cristiano Ronaldo ganó por derechos de imagen y nunca declaró.
De acuerdo a la prestigiosa revista alemana Der Spiegel, el astro del fútbol mundial solo tributó al fisco 5,6 millones de euros. Eso no llega al 4 por ciento de lo facturado en contratos con marcas como Nike, Konami, Unilever, Kentucky Fried Chicken (KFC) y Toyota Tailandia.
Desde hace tiempo, el portugués posee cuentas en paraísos fiscales de las Islas Vírgenes Británicas. La sospecha es que son empresas fantasmas sin personal ni actividad real.
Para intentar demostrar esas irregularidades, Hacienda le abrió un expediente. La mirada también apunta hacia su representante, Jorge Mendes, muy vinculado a otro gigante del fútbol: el DT José Mourinho.