Por primera vez en su carrera, Lionel Messi se sacó todos los filtros para dar una entrevista tan contundente como interesante. Obviamente, el foco estuvo en el difícil momento que vive la Selección Argentina y en los polémicos últimos tiempos de Jorge Sampaoli y la reconstrucción que encara Scaloni.
"Se dijeron muchas mentiras. Es algo que se hizo costumbre. Me da bronca porque la gente cree lo que se dice, por eso creo que la gente me tenía que escuchar a mí (...) La gente compra todo lo que le dicen y después yo soy el hijo de puta, mi viejo maneja la AFA, hace lo que nosotros queremos. Y son todas mentiras", reflexionó en el inicio de la nota con Radio Club FM 94.7.
"El golpe en el Mundial fue muy duro. Sólo pensé en encerrarme, en hacer el duelo solo, con mi familia".
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"Costó volver a hablar porque el golpe en el Mundial fue muy duro. Sólo pensé en encerrarme, en hacer el duelo solo, con mi familia. Intenté aislarme de todo, alejarme un poquito de la Selección, dejar pasar el tiempo y enfriarme", reconoció sobre el 'duelo' post Rusia 2018, y lamentó que la generación de jugadores haya sido "maltratada durante 10 años".
Sufrimiento
Consultado por el presunto "club de amigos" en que se habría convertido la Selección en los últimos torneos, Messi lo descartó y apuntó a quienes apoyaban esa teoría: "Que yo ponía a los jugadores, a los técnicos, que manejaba todo en la AFA. Es una locura. A mi viejo lo metieron continuamente, que tenía poder para hacer cosas en la AFA. Nada que ver. Y la familia es la que sufre".
Sin embargo, la Pulga aclaró que seguirá jugando para Argentina, inclusive sin escuchar el pedido de su propia familia. "Yo quiero ganar algo con la Selección. Cuando yo decidí volver tuve mucha gente en contra que me decía que estaba loco, que para qué, que no volviera: mis amigos, mi familia".
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En ese sentido, relató un diálogo con su hijo Thiago, de apenas seis años. "Ya entiende y me pregunta: ¿por qué te matan en Argentina? ¿Por qué no te quieren en la Selección? ¿Por qué no te quieren ahí? Y yo le digo que bueno, que no son todos, que hay mucha gente que me quiere... Es difícil", lamentó.
"Mi hijo ya entiende y me pregunta: ¿por qué te matan en Argentina?".
"Yo no tengo que demostrar nada a nadie. No tenemos que estar todo el tiempo vendiendo humo, no voy a andar diciendo que amo a la Selección. No soy así, que digan lo que quieran”, añadió.
Apoyo a Scaloni; cara a cara con Sampaoli
Si algo dejó claro Messi fue su banca al DT encargado de la renovación del plantel, aunque advirtió que habrá que tener paciencia: "Es bueno el cambio de generación pero fue muy brusco. Es difícil hacerlo y va a llevar tiempo"
"Nos juntamos con Jorge Sampaoli y nos dijimos todo. No queríamos irnos en primera ronda".
"Si nosotros hubiéramos ganado la final en Brasil era todo distinto. Y desde ahí llegó todo el quilombo. Quizá la relación con la prensa debía ser otra, de las dos partes. Nosotros también nos equivocamos, nos cerramos y no quisimos hablar... Si uno tira para un lado y otro para el otro no se puede. La Selección está por encima de cualquiera", subrayó Lio.
Otro tema picante que tocó fue la relación con el escandaloso entrenador durante Rusia 2018: "Nos juntamos con Jorge Sampaoli y nos dijimos todo. No queríamos irnos en primera ronda, era una situación límite. Se dio todo mal desde el primer partido".