Lionel Messi ya está acostumbrado a que, en cualquier lugar del mundo donde viaje, la gente se vuelva loca para pedirle un autógrafo o una foto. Chicos o grandes, hombres o mujeres, argentinos o extranjeros, fanáticos del Barcelona o de otro club... todos y todas se mueren por una instantanea junto a la estrella.
Sin embargo, lo que sucedió en el aeropuerto de Roma no suele ser cotidiano. Los policías encargados de darle seguridad al plantel catalán fueron los que le pidieron una selfie.
La Pulga accedió y los agentes desbordaron de felicidad. Sin embargo, la acción provocó la reprimenda de uno de sus superiores, quién les recriminó que en lugar de cumplir con su trabajo estuvieran sacándose fotos con los jugadores.
Barcelona debutará esta tarde en la nueva edición de la Liga de Campeones (Champions League) visitando a la Roma de Italia. Messi y Mascherano serán titulares.