Jamey Jewells y Adam Lancia actuaron naturalmente y nunca imaginaron que la foto que tomó Ueslei Marcelino, de la agencia Reuters, iba a quedar cómo una de las más recordadas de los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro.
Sucedió el viernes 16 de septiembre tras el partido de básquetbol femenino en silla de ruedas entre Canadá y China. Las chicas canadienses vencieron por 63 a 52, logrando el quinto puesto. Una de sus integrantes en Jamey, quien sufrió un grave accidente de tránsito a los 14 años. Ahora tiene 27 y fue su segundo juego tras Londres 2012.
Su marido Adam tiene 36 años y también participó en Río en el equipo masculino de Canadá. Nació sin piernas y utiliza prótesis desde que tiene un año. A los nueve se enamoró del básquet y ya participó en cuatro Paralímpicos.
Se casaron hace cuatro años y juntos comparten el deporte y la vida. Tienen una fundación que ayuda a integrarse a jóvenes con problemas físicos. Ese día, él fue a verla jugar a ella y se puso contento con el triunfo. Fue a saludarla y ese gesto de amor, hoy recorre el mundo.