La noticia cayó como una bomba en el mundo deportivo y sigue dejando tela para cortar alrededor del planeta. Barcelona llegó a un acuerdo con Lionel Messi y el crack rosarino dejará el club después de 17 temporadas como profesional y 34 títulos en total.
Luego de conocerse el comunicado del conjunto culé, durante todo el día se sucedieron hipótesis sobre si realmente era verdadera la resolución o si se trataba de una estrategia fina del Barca para presionar a La Liga por impedir la renovación del mejor futbolista del mundo.
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Lo cierto es que este viernes, el presidente del Barcelona brindó una conferencia de prensa en la cual había una gran expectativa para conocer el detrás de escena del bombazo mundial. "No quiero generar falsa esperanza: esta negociación ha concluido porque no podíamos inscribir al jugador por el limite salarial del Barça y la Liga no es flexible en cuanto a ampliarlo", manifestó Joan Laporta, cerrándole las puertas a cualquier idea de vuelta atrás.
El mandatario confirmó en forma tajante el final de la carrera de Messi en el Barca y apuntó directamente contra la gestión anterior: "Lamentablemente, hemos recibido una herencia nefasta y la masa deportiva en el club representa un 110% de los ingresos totales del club y no tenemos margen salarial. Era peor de lo que habíamos previsto. Ya saben que las normas que rigen la Liga pasan por un fair play financiero".
En ese sentido, aseguró que no estaba "dispuesto a hipotecar al club, incluso ni por el mejor jugador del mundo". "Estoy triste pero tambien estoy seguro de que hicimos lo mejor para el Barcelona. La entidad está por encima de jugadores, entrenadores y dirigentes, de todo", reforzó Laporta.
Más allá de todo lo que se había dicho, con muchas críticas contra Leo, el presidente del Barcelona aclaró que la Pulga "siempre tuvo la voluntad de quedarse". "Han sido negociaciones muy intensas y quiero felicitar a las partes porque habían llegado a acuerdos", cerró Laporta.