Guillermo Burdisso logró recuperarse de un golpe duro para su carrera y para su vida: en julio le detectaron una arritmia cardíaca lo obligó a alejarse de las canchas. Pero el defensor nunca se dio por vencido y cuatro meses después recibió el alta médica.
"Después de muchos estudios y sesiones de entrenamiento con resultados positivos, FELIZ de tener el ALTA MÉDICA. Gracias Dr. Marani y Dr. Peidró por acompañarme y ayudarme a estar apto físicamente para arrancar de vuelta y meterme de lleno en esto que tanto amo y deseé", escribió el defensor en Twitter.
Al ex Roma, Galatasaray, Boca, Independiente y Rosario Central, entre otros clubes, le habían detectado la arritmia cuando se realizó los chequeos médicos para sumarse a San Lorenzo en el mercado de pases de invierno. El percance lo dejó afuera del club.
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Según había contado en una entrevista con La Nación, la recuperación llegó gracias a un tratamiento "cero invasivo". "Sólo tengo que descansar, relajar el corazón y desestresarme. Llevar una vida normal, pero sin el estrés del fútbol ni del alto rendimiento", señaló hace 10 días.
El central de 31 años nacido en la localidad cordobesa de Altos de Chipión, hermano de Nicolás Burdisso (ex jugador y actual secretario deportivo de Boca), tiene previsto regresar al fútbol profesional en 2020.