La muerte de Jorge Acero Cali (49) conmocionó al mundo del boxeo en Argentina. El sábado por la noche murió a causa de un infarto agudo de miocardio, según el informe preliminar de la autopsia.
Se encontraba descansando en un hotel de La Pampa, adonde había viajado muy entusiasmado luego de organizar un evento junto al Chino Maidana en el estadio de Estudiantes de Santa Rosa. De acuerdo a lo que contó su hermana, hace más de un año sufrió un infarto y tenía cuatro stents coronarios.
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"Después del evento se fue al casino junto a sus compañeros y amigos [...] Regresaron al hotel y se acostó, a las 9, 9:30 AM, él tenía una reunión y como todos saben, era muy puntual, al no bajar su compañero de cuarto fue a despertarlo [...] y es ahí cuando lo encontró y llamó urgente al médico del equipo que pudo corroborar lo peor, su manito estaba en su pecho", relató a través de las redes sociales.
El excampeón de kickboxing además de su pasión por el deporte, era fanático de los fierros. La millonaria herencia que dejó a su esposa Silvina y su hijo Máximo incluye una colección de autos de alta gama.
Gracias a su exitosa carrera, se compró tres Ferrari en diferentes épocas. "Me di el lujo en mi carrera deportiva de comprarme mi primera Ferrari, una 355; después una 360 y una 458 Spider", había revelado en una entrevista.
Pero también tenía un Porsche y hasta le compró a Lionel Messi un BMW X6M, después de que el futbolista le reventara una cubierta cuando viajaba con destino a Rosario.
También dejó dos sociedades, una en Italia y otra en Argentina. En la sucesión, se conoció que Acero Cali tenía un patrimonio aún mayor: dejó hasta bienes y propiedades. El problema es que no están a su nombre y será una verdadera odisea el traspaso.