A los 30 minutos del segundo tiempo del encuentro de Sub 21 Máxi se sintió mal y le pidió al árbitro del partido que lo acompañara hasta el banco de suplentes. Esperó unos minutos, pero su estado empeoró y los médicos decidieron trasladarlo al Hospital de Carlos Tejedor.
Allí, nunca se recuperó y fue derivado a un nosocomio de mayor complejidad, porque entró en coma farmacológico.
El jugador tenía 21 años y falleció en el Hospital de Junín. Ante esta dolorosa situación, la Liga del Oeste decretó duelo por tres días, suspendiendo la actividad de divisiones inferiores, Sub 21 y primera división.