Este domingo 20 de noviembre, a las 19.15, cerca de tres mil fanáticos de Talleres serán protagonistas de otro momento que siempre recordarán. Ese día, el equipo albiazul jugará su primer partido de visitante con hinchada propia desde el regreso a la máxima categoría.
El gran momento del equipo albiazul, con cuatro victorias consecutivas y lejos del descenso, provocó un gran entusiasmo que se reflejó desde la tarde de ayer en las afueras del Estadio Kempes, lugar donde a las 10 de la mañana comenzaron a venderse las entradas. Desde Rafaela enviaron 2.200 populares a 200 pesos y 500 plateas a 500 pesos.
Al abrirse las boleterías, se produjeron incidentes entre los simpatizantes y la Policía. Algunos de los hinchas protestaron porque la barra brava de La Fiel llegó y se coló en la fila. Hubo empujones, golpes, botellas que volaron y disparo de balas de gomas.
Después de algunos momentos de tensión, volvió la calma, pero los incidentes dejaron, al menos, un joven herido, como lo muestra la foto tomada por Mariano Nievas, periodista de Radio Mitre.