Agustín Alberto Collouti, el vendedor ambulante al que inspectores municipales le incautaron el pan casero en la plaza Jerónimo del Barco y se lo comieron con muchas ganas, recibió un acta que le labraron por la infracción a una semana del indignante hecho.
Además, fue citado por el Juzgado de Falta Nº14, secretaría de Silvina Longo, para que haga su descargo por la supuesta infracción: “Venta ambulante en la vía pública sin autorización”.
Esto lo obliga a presentarse a realizar su descargo y presentar pruebas, porque tal como había asegurado, siempre era extorsionado por los inspectores, a quienes les debía dar dinero para continuar vendiendo en la vía pública.
Cuando se conocieron los hechos, el intendente Ramón Mestre publicó un mensaje lamentando el accionar de los inspectores. Solicitó que la comunidad lo ayude a denunciar este tipo de situaciones.
Después de que se viralizara el episodio, los empleados quedaron suspendidos, se les abrió un sumario administrativo y fueron denunciados penalmente.